martes, 20 de enero de 2009

Los dioses estúpidos

-No los hemos considerado como personas. Manifestó el más alto apesadumbrado.
Lo dioses, -respondió el otro, -también somos estúpidos, y otra vez hemos fallado.
Estaban en el fondo de una tabernita pequeña y oscura, de esas que huelen a vino de Jerez y a mojama de atún servida sobre papel encerado. Pidieron otra y chocaron con gesto cómplice sus vasos.
¡Porque tú que puedes!,- sentenció el mayor, -hagas que vuelva a amanecer.
Y amaneció.

32 comentarios:

Isabel Barceló Chico dijo...

Ya me gustaría, ya, que esos dioses hicieran amanecer la paz. Besos, querido amigo.

LA CASA ENCENDIDA dijo...

El amanecer nuestro lo podemos conseguir si ponemos empeño e ilusión, el de los demás..., también contribuimos a ello.
Como acaban de comentarte, ojalá estos dioses hicieran algo por la paz. ¡Claro que quizá debemos gritar y decir que no queremos esas guerras!
Besicos

M. Domínguez Senra dijo...

Fiat lux, y la luz se hizo. No me cansaría de leer *Sobre los ángeles, de R. Alberti. Seguro que habría un ángel de la taberna.

Pedro J. Sabalete Gil dijo...

Y si de camino quitara el frío...

Me encantó las palabras que definían la taberna. Me hiciste verla.

Abrazos, amigo.

ani dijo...

Los dioses se emborrachan y pasan cosas horribles.

Cuando despiertan de su letargo etílico, descubren que todo está perdido en el mundo y vuelven a la taberna, a por más.

Tal es el círculo de la tristeza y el caos.

O bien los Dioses no existen, y por eso existe Gaza.

Un gusto pasar por tus letras.

Yo también vivo las palabras, con las palabras y de las palabras.

aapayés dijo...

Muy preciosos versos...

me gusta tu blog y te sigo...

un abrazo fraterno y solidario..

CalidaSirena dijo...

Ojalá que todos los deseos se pudieran cumplir de esa manera, con solo desearlo se acabarían las guerras, la hambre y la miseria...Ojalá fuese todo tan fácil..
Besos cálidos

LA TIGRITA dijo...

Esta vez los dioses se han dado vacaciones y por eso el hombre se ha aprovechado y se han desatado estos atrocidades de guerras.
No dejaron nota alguna de su regreso?
Saluditos!!!
Denise

María Narro dijo...

¡dices tanto con tan poco!

se puede englobar todo: el racismo, las guerras, discriminación...

pero aunque siempre amanezca, me temo que las segundas oportunidades sólo se dan en la literatura.

un beso.

Satine dijo...

las circunstancias siempre son eso!!!podríamos cambiarlas por intervención divina??? ojalá fuera todo tan sencillo y los deseos se cumplan...besis mi niño

Manuela Fernández dijo...

Detrás de un ocaso siempre hay un amanecer y después otro ocaso y así se van alternando por siempre, como a una guerra le sigue la paz y luego otra guerra y así a lo largo de la historia por los siglos de los siglos.

Olga Bernad dijo...

Ay, qué peligro tienen los dioses, en qué andarán pensando muchas veces. Misterio divino:-)
Menos mal que suele amanecer...
Un beso, piloto.

magic dijo...

Donde estás? Ilumina con tu rayo el retorno ...

La esperanza, la luz, debe inundarnos a todos, no para la Paz, para evitar las guerras y así los unos con los otros caminar hacia un mundo mejor ...

Un abrazo, amigo
Paz duradera en Gaza

Víctor González dijo...

Y a mí maestra Isabel, pero la literatura nos permite licencias que no siempre son posibles en la realidad. Veremos en breve.
Beso.

Víctor González dijo...

Bien visto Nany. Hagamos nosotros el papel de los dioses.
Besico.

Víctor González dijo...

Alberti querida Marta, resultó un sabio para muchas cosas. No te canses nunca.
Beso animado.

Víctor González dijo...

El frío Goathemala se lo llevará el paso de los días, la noche el de las horas, la guerra el paso de los intereses, unos cercanos, otros muy muy lejanos, ya me entiendes.
Abrazo fraterno.

Víctor González dijo...

Particularmente Any, creo que los dioses en su origen fueron inventados para combatir el miedo.
Eres bienvenida, un beso.

Víctor González dijo...

Si me permites la broma Adolfo, agradezco que valores mi prosa como si de poesía se tratase, Eso lo bordaba J. Ramón y lo hace García Márquez a día de hoy en cada libro, (escribir con esa musicalidad y ese ritmo es lo que yo quisiera)
Gracias por tu visita, yo también te sigo.
Abrazo.

Víctor González dijo...

En la blogosfera Cálida hay mucha gente deseándolo, y en la calle en la misma proporción. No es tan fácil, pero no es imposible.
Gracias por venir y un beso cálido.

Víctor González dijo...

Si Denise, y la habéis traído todos vosotros.
Un beso

Víctor González dijo...

Intento María aprender el oficio de condensar por dos motivos. Para escribir en un blog necesito tiempo y los micros me exigen poco, y para que la gente pueda leer textos, necesita tiempo y los de 100 requieren poco. Así todos quedamos satisfechos.
Agradezco tu visita, espero que repitas. Beso.

Víctor González dijo...

Tal vez Satine se cumplan y pronto. Ni pierdas la esperanza, ni dejes de venir, siempre habrá un punto de esperanza aquí y un recuerdo para los que sufren.
Besines.

Víctor González dijo...

Caramba Manly! Visto así no queda sitio ni para la esperanza ni para la evolución. Ambas son necesarias, es una mera cuestión de supervivencia.
Saludos.

Víctor González dijo...

Otro beso gran Olga, y que amanezca pronto, lo vamos necesitando ya verdad?

Víctor González dijo...

Ya sabes Magic que la paz no es la meta, la paz es el camino.
Beso grande.

Anónimo dijo...

Y amaneció, que no es poco. Pero no como un día cualquiera. Este era un amanecer diferente, esperado...esperanzador

(oye, la taberna se parece mucho a una famosa de aquí de Cádiz, la del Manteca)

Abrazos y amaneceres

La chica de ayer dijo...

Todos somos dioses... en nuestro pequeño/ gran mundo!

Víctor González dijo...

El paraíso Extractos, tiene sucursales en múltiples lugares desde los que es imponente ver amanecer.
Beso.

Víctor González dijo...

Cierto, todos lo somos a nuestra manera Chica de ayer. Por cierto, evocador nombre el que utilizas. Encantado de verte por aquí.

Violeta Filetti dijo...

Evoca gran realismo con ese increible deje de fantasía..
Amanece para unos y para otros pocos, la oscuridad es una fiel compañera.

Rebeca Gonzalo dijo...

Es curioso tu relato habla de dioses que no tratan a los humanos como tales y paradojas de la vida, tu humanizas a esos dioses. ¡Genial!